sábado, 10 de abril de 2021

Un cuento con su punto de esperanza

He decidido celebrar la primavera con todos los lectores de mi blog presentando este cuento alado y breve como una canción, una sencilla canción de amor. Hará una año que lo escribí; las fotografías que lo acompañan no pretenden describir, sino sugerir.

Sin pesar

Apenas un punto en el cielo; se acercaba, se volvía luminoso a medida que perdía altura y ganaba formas, volumen, cuerpo, algo parecido a alas.

En una trayectoria elíptica comenzó a rodearnos, ¿o acaso no he dicho que éramos dos? Mi madre y yo. Porque dormía enferma de muerte deseé que se volviera chiquita para poder tomarla en brazos y mecerla y cantarle lo mismo que ella me cantaba a mí, una antigua nana andaluza, un vaivén tonal lento y triste que yo no podía recordar. Sonó una voz. Y era música, era un ángel de luz a nuestro lado, y era la nana olvidada: a cada estrofa de ternura mi madre se hacía más pequeña, hasta que pude cogerla en brazos, arrullarla y darle una pizca del amor que merecía. Miré al ángel y todo en él eran ojos, profundos, grandes, brillantes... Y alas transparentes.

De pronto, unos brazos extendidos, unas manos en espera y un ruego que entendí sin necesidad de palabras: se la di.

Un minuto después solo divisé un punto en la lejanía.

                                       ..............................................................


                                                               


                                                                   




                                






8 comentarios:

  1. Inteligente relato y sugerentes fotos. Seguimos...

    ResponderEliminar
  2. Cuanta belleza en el instante,y cuánto amor agradecido, y si todos nos volviéramos chiquitos,y acunados por el ser que un dia tuvimos dentro? que final mas hermoso, acunar a una madre, me ha conmovido.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Un deseo imposible que se convierte en sentimiento posible, a modo de protección callada a quien amamos.
      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Quiero yo ese final para mí (si resulta que no soy inmortal).
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Ufff... Me he estremecido! Qué preciosidad Josefina. Un abrazo enorme!

    ResponderEliminar
  5. Tierno y necesario, hoy también. Me ha encantado.

    ResponderEliminar
  6. Precioso, tierno y muy necesario. Me ha encantado.
    Las fotos también.
    Besos.

    ResponderEliminar